Sorry, you need to enable JavaScript to visit this website.
No nos dábamos cuenta que habíamos contado de alguna manera conque no nos faltases, / como si todos pudiera faltar menos tus ojos leales aguardando la señal del amigo; / por eso mucho antes que el temor, mucho antes que la pena, nos recorrió la extrañeza / de que fueras tú el elegido para abandonarnos primero.